F. K.
Por los rizos de las efes
subtilmente
se enfila la noche,
las crines azules,
la musica de la sangre,
el re-menor de las uvas..
Y tus misterios
salen de las sombras
dormidas en tus calidas palmas,
como los pajaros magicos de los cuentos persas,
bailando sobre el
carbon incandescente..
Y de repente
el silencio rompe
la risa de los iris
bajo la cupula
del campanario mudo..